· Cuando nos encontramos una billetera llena de dinero y decidimos devolverla.
· Cuando encontramos el examen final en el escritorio de la profesora y decidimos no leerlo.
· Cuando no hacemos fraude en un examen.
· Cuando reconocemos que nos equivocamos y somos honestos aceptándolo.
Pero tambien hay situaciones en la vida donde hacemos todo lo contrario, y no somos HONESTOS ni con LOS DEMAS ni con NOSOTROS MISMOS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario